Meta en la vida: pasar las festividades solo alguna vez. Realmente solo.

La última vez, estaba en una etapa en que buscaba interacción social y la siguiente, no me dejaron tranquilo en toda la noche a punta de llamadas y mensajes.

Definitivamente la soledad ya no es parte de mi vida y lo detesto.

Cada día que pasa es uno más para mostrar que soy un fracaso. Dos grados académicos y nada que mostrar de ellos. Se supone que he investigado y publicado, pero no he participado de nada que lleve mi nombre, realmente. Estoy estancado, no he hecho nada útil. No tengo habilidades, no tengo competencias, no tengo intereses; se suponía que, en algún momento, iba a ser algún tipo de creativo o investigador, ¿qué me queda ahora? Un sitio donde el movimiento se me hace imposible, por mi propia inoperancia e incapacidad de obtener cualquier tipo de oportunidad real.

Lo mejor de todo es que, con estos grados que tengo, no hago uno. Me sirven para mantenerme suficientemente estable como para que parezca que estoy bien, pero no es suficiente, porque nunca es suficiente para nadie a mi alrededor. Yo no soy suficiente, nunca lo fui, nunca lo seré. No soy más que un evento en la estadística. Ni suficientemente brillante como para destacar, ni suficientemente maldito como para pudrirme como corresponde. Solo queda seguir existiendo, porque ni para terminarlo todo sirvo.

Pensé por un momento en intentar el desafío de NaNoWriMo, pero ¿para qué? ¿Qué basura he podido producir que sea digna de mención? ¿Qué porquería he terminado en mi puta vida? Nada, nunca he terminado nada. Los grados fueron regalos, no los terminé yo, los terminaron por mí, ya que necesitaban gente que saliera.

Ni siquiera puedo sacar de mí lo que siento del único modo que sé expresarme, que es con la palabra escrita. Esto es solo un mísero reporte de hechos irrelevantes, frío, vacío, sin ninguna emoción destacable ni florituras del lenguaje que lo vuelvan agradable, al menos.

Ojalá me atropellen y no quede suficiente de mí como para un funeral.

 Quiero tener una pistola cargada, ponérmela en la boca y disparar, a ver si así logro terminar de una perra vez. A ver si así, por una sola vez, siento que serví para algo.

 Me gustaría que la gente dejara de preguntarme cosas, que dejara de pedirme opiniones. Si tengo que opinar alguna mierda, lo haré si no me lo preguntan o sin que me lo pregunten.

Me gustaría que la gente dejara de pedirme cosas, no sirvo para nada ni valgo para nada.

Me gustaría poder terminar con todo de una puta vez, pero de nuevo, soy demasiado cobarde y soy la última de mis prioridades.

Todos los malditos días alguna cosa que no me deja en paz, todos los días algún atado por el que me atacan.

Estoy jodidamente cansado.

Ojalá alguien me mate pronto, porque yo no tengo las pelotas para hacerlo.

Tengo una seria necesidad de volver a escribir como la gente (no es que nunca lo haya hecho, siendo estrictos), pero entre que no me animo y que no me da por dirigir ningún tipo de narrativa a ninguna parte. Muchas pseudo ideas o pseudo comienzos que no se desarrollan en nada, no guían por ningún sitio y terminan por simplemente cortarse cuando se me va la inspiración. A lo más que puedo aspirar en este momento es a un miserable texto técnico que sirva de enunciado pobremente hilado para explicar un problema.

Por otra parte, este lugar es sencillamente mi vomitadero de ideas malas y frustración barata que ni siquiera me sirve para expresar lo que siento como debiera. ¿Realmente puedo escribir alguna mierda o solo puedo simplemente juntar palabras y que parezca que me comunico?

 ¿Decirle a alguien que nunca le he sacado en cara nada cuenta como sacárselo en cara? Yahoo answers.

 Existen ocasiones en las que me molesta no ser yo mismo, pero la verdad es que hace tanto que me alejé de ese pobre imbécil, que no tengo idea de quién sea. Lo que soy ahora es una carcasa vacía que sirve de máscara para tratar de funcionar en un mundo que no me tolera, no me quiere ni le importa lo que yo haga o deje de hacer.

Se supone que cumpla con mis responsabilidades, y ya que no puedo ni ser yo en mi propia puta casa, no tengo un lugar de descanso, un sitio donde dejar de cubrirme por todos los flancos de todos los ataques. Todo lo que puedo hacer es escapar, esconderme detrás de fachadas de mierda que no me sirven de nada, para tratar de proteger lo poco que me queda.

No pasa un día en que no tenga algún problema o me hagan escándalo por algo. Estoy realmente harto, lo único que quiero es que alguien me mate rápido, porque yo jamás lo haré. Jamás tendré la fuerza para hacerlo, soy un cobarde insufrible. Me desvivo por tratar de hacer la vida tolerable a gente que se desvive por hacérmela intolerable a mí. Pero que no tienen las agallas de matarme de una puta vez, probablemente porque todavía les sirvo.

 A veces suelo preguntarme que por qué me pasan las cosas a mí, pero lamentablemente sé la respuesta y es porque soy un redomado imbécil que es incapaz de decir que no a nadie. Debería matarme de una puta vez.

 Sin importar lo que haga, siempre está mal. Y lo peor es que es verdad, no son apreciaciones. Siempre hago todo mal.

Pero a pesar de todo, soy de los privilegiados y no tengo derecho a quejarme de nada.

 Me preguntaría que para qué lo intento, pero la verdad es que lo intento porque soy muy cobarde como para hacer ninguna otra cosa.

Esta cosa que nadie lee se ha convertido de a poco en una especie de diario mal llevado de mis ganas de matarme, pero me importa una verga. ¿A quién mierda le va a importar lo que yo tenga que decir?

Nadie que deba escucharme me escucha y realmente no es que haya gente que quiera hacerlo, solo están allí mientras yo estoy hablando. En algún momento de mi vida, me di cuenta de que a la gente le importaba tan poco lo que yo dijera que terminé por dedicarme a, simplemente, hablar rápido (después de una infancia de hablar pausado o, al menos, a una velocidad normal), porque así podría vomitar mis ideas antes de que a alguien se le ocurriera interrumpirme. Cada vez que hablo lento, cosa que suele pasar muy seguido, si tengo que pensar en lo que voy a decir, me interrumpen, incluso las personas que se supone que me están escuchando por voluntad propia, al haberme hecho preguntas, así que, ¿qué más me queda esperar del resto? Probablemente por lo único que me molesta aún es porque quedo con una sensación desagradable al no poder terminar las ideas que digo, como si me faltara algo por terminar constantemente. Ninguna conversación va nunca bien por eso.

No obstante todo eso, lo único para lo que siempre me escuchan es para malinterpretarme. Particularmente les resulta cómodo pensar que yo tengo intenciones completamente diferentes a las que pretendo expresar. En principio, me da lo mismo que la gente interprete la mierda que se le salga de los cojones, lo que me molesta es el descaro de exigirme a mí un estándar de comportamiento que nadie sigue conmigo. Básicamente, si yo digo algo que suena antipático, soy lo peor y tienen el derecho de desquitarse y enojarse, pero si me dicen algo antipático a mí, soy exagerado y que no joda.

Estoy harto de todo. Ojalá tener las agallas de terminar con todo de una puta vez y no preocuparme más de todo lo que me rodea.

En picada

Tres días de mierda, debiendo aislarme por culpa de las putas elecciones que tomé en el pasado y por ponerme a fingir que puedo hacer algo bueno por alguien. Que alguien me mate, ya que soy demasiado cobarde para matarme yo.